Hoy me he levantado con una de esas noticias que le joden a uno el día porque lo que cuentan le fastidiará en lo venidero. Alegando falsas razones económicas, y dando muestra real de sectarismo ideológico, la nueva dirección de Público, esa procedente de PRISA, ha decidido prescindir de Rafael Reig. Hasta donde alcanzo a saber, Reig es uno de los cofundadores de este diario, y por lo que a mí respecta, uno de sus principales activos, sin el cual el periódico de Mediapro pierde enteros vertiginosamente.
Público, como todos, es un periódico de claroscuros, pero con una virtud que muy pocos comparten: dar voz a los que no suelen tenerla en los medios. Desde el comienzo, y quitando la labor de algún buen corresponsal, tal que Daniel Besteiro o Sáenz de Ugarte, su capital ha residido principalmente en las firmas de columnistas y opinantes. En sus inicios, aparecieron en tromba, aireando el panorama, los Pascual Serrano, Santiago Alba, Belén Gopegui, Rafa Escudero y una buena lista más de intelectuales 'antiimperialistas', críticos e independientes. Entre los columnistas, sobresalía el duo de Reig y Ortiz y, últimamente, destacan las opiniones afiladas y documentadas de Escudier. Fue precisamente a través de un apunte al natural de Ortiz que descubrí a su compañero de página, y desde entonces me pareció de lo mejor que se publicaba en la prensa española, por ácido, rotundo, popular, preciso, humorístico y profundo.
Aunque no ha dejado de aumentar su tirada, Público busca todavía su espacio de lectores entre la izquierda. A juzgar por contribuciones recientes como la de Daniel Múgica, parece que la apuesta comienza a ser la colocación en el hipotético sector izquierdista del PSOE, algo comprensible en Cataluña pero menos factible en el resto del Estado. Si a esta ubicación le añadimos la constante y a veces simplista oposición del periódico al PP, el lugar de Reig se hacía cada vez más angosto, con su permanente y fundamentada crítica a la socialdemocracia, que en muchas ocasiones se transmutaba en una contraproducente benevolencia ante la derecha. Puede incluso, y lo digo con todo el respeto y la admiración por el autor, que la fórmula de la contestación a veces contundente, malhumorada y desviada del asunto tratado por la carta estuviese en vías de agotarse, pero se trataría entonces, como en un inicio se pensó, de responder en lugar de refutar, mas en ningún caso de dar boleto al principal columnista del periódico.
Si bien han aducido motivos económicos, la decisión no puede ser más nefasta en términos estrictamente comerciales, dado que ese pretendido espacio dentro del pesebre socialista está ya copado por El País y diversos rotativos locales, mientras que el otro, el estrictamente de izquierdas, en el que Reig atraía lectores e interlocutores, ha estado y va camino de seguir huérfano. Como el desatino es evidente, puede incluso que tal sea el objetivo perseguido: acabar con Público tal y como Nacho Escolar empezó a diseñarlo y quitar de la escena a gente como Reig, que con eficacia incomparable daba buenos, sintéticos y afilados argumentos para oponerse activamente al orden establecido.
El problema sería entonces precisamente ése: que Reig atraía demasiados lectores como para seguir prestándole un altavoz, aunque al retirárselo es posible que el aparato enmudezca o se limite a repetir la cantinela que otros ya difunden con más decibelios.
7 comentarios:
Me parece que usted esperaba demasiado de Publico, siempre he sentido escepticismo ante este nuevo periodico y nunca me he acabado de creer que fuera realmente de izquierdas. Y ya ni le cuento, cuando un dia fui a comprarlo y me regalaron el Odiel, no sé como no me dió algo, ese periodico pelota del psoe provin cial y en manos de la familia Balboa, que quiere a toda costa construir una refineria en Badajoz, atravesar con una tuberia toda la provincia de Huelva y destrozar el parque natural de la sierra. No existe ningun periodico que hoy por hoy defienda los ideales de la izquierda, todos se deben a empresas de la comunicación que son las que mandan. Ah! y las noticias de Andalucia en dicho periodico dejan bastante que desear o son inexistentes. Ahora bien lo mejor, que no se financian con los anuncios de sexo, como el pais, el mundo y el ultracatolico abc, un saludo.
Me da mucha pena que Reig no siga escribiendo en Publico. Sigue estando Mauro Entralgo, claro, pero comprar un periodico solo por la tira comica me da como
verguenza.
Ademas, si se trata de una decision empresarial, que tenga un efecto empresarial: menos ventas. Una por lo menos. Aunque contando contando hoy ya me salen cinco.
No se trata tanto de espectativas sino de un problema de cálculo, Anónimo, al menos para mi. Pense que era una publicacion para la que yo, por ejemplo, era el publico objetivo, y eso me gustaba. Pero, o me equivoque, o ha cambiado, porque cada vez mas parece que el publico objetivo es el votante del PSOE. Hace ya tiempo vengo escuchando que la primera apertura de miras del periodico ha ido reduciendose al menos en algunos temas.
Voy a echar de menos a Reig. Incluso cuando la respuesta a la carta era bronca y casi insultante, incluso cuando no estaba en absoluto de acuerdo con el, me gustaba leerla porque siempre tenia un punto de vista original,una vuelta al asunto en la que yo no había caido. Casi me gustaba mas la papelera de reciclaje. Me gustan sus novelas un monton, y su blog. Ademas he tenido la suerte de conocerle en persona y me parecio un tipo muy inteligente y que se rie constantemente de si mismo, lo que ya es motivo suficiente para lamentar su despido.
PD. Rafa Escudero como intelectual no se yo, eh?
Pues si te dijera que leer la columna de Reig era casi mi única motivación para acercarme a Público. Cuando vi que que se repetía en la edición digital pensé que se había tomado el fin de semana libre, como todo hijo de vecino.
En fin, no soy de los que se leen el periódico entero, así que ahora tendré que buscarme otra cosa para entretenerme; quizá me pase al ¡Hola!, total, no hay tanta diferencia.
Para Anónimo: sé de más que no se le pueden pedir peras al olmo, y que un periódico de difusión nacional y de propiedad empresarial no puede dar de sí todo lo que se desearía desde la izquierda. Pero entonces se impone el realismo: si buscamos opinión independiente, busquemos a nuestros columnistas, blogueros y a nuestros medios por internet, uno a uno, haciendo una selección; si por el contrario queremos gozar del placer de leer kla prensa escrita mientras desayunamos o en un descanso, hay que conformarse con el mejor producto, que no es igual que otro hecho a medida. Y eso lo estaba cumpliendo Público con creces y bastante bien.
A mí, que no soy purista, ni me molestan las opiniones de conservadores o socialdemócratas, ni el pluralismo en general. Sólo me insulta que me tomen el pelo, que hagan propaganda o que tergiversen los hechos en beneficio propio. Por eso, por ejemplo, me resulta tan estomagante El País y sus opiniones sobre Latinoamérica. Por eso también no tuve más remedio que dejar de comprar Público en el anterior período electoral. Y por eso no leo El Mundo o me escandalizo con la mala fe manipuladora que exhiben cada dos por tres en La Razón o ABC.
Sin embargo, todas esas esperanzas inciales se van diluyendo. Ortiz desaparecido, Escolar en un segundo plano, ahora Reig expulsado, mientras van entrando otros como Daniel Múgica. En fin, seguramente lo compraré cuando me den una buena peli a 50 céntimos y leeré a ver quien escribe en Dominio Público, pero no creo que más. Me ha insultado de veras que prescindan de Reig de ese modo...
Para Mar: tienes razón, una de sus principales virtudes, además de redactar muy bien, era la inteligencia polémica que mostraba en cada una de sus respuestas, muchas de ellas imprevisibles. Creo, sin embargo, que incurría en exceso en dos errores: en cierta insolencia con quien enviaba la carta, que en ocasiones se convertía directamente en una mala interpretación de su contenido, y en la reiteración temática (los integristas católicos) y hasta nominal, sacando cada dos por tres a ociosos mediocres tal que Enrique Chicote Serna y dos o tres más que parecían ascendidos a la condición de columnistas de Público por equivocación de Reig.
Pero ya te digo, eso no justifica la invitación forzosa a irse de Opinión y entrar en un papel secundario en Cultura. Bastaba reformular la cosa, alterar la línea, sugerir mayor respeto y atención hacia los autores de las cartas, o directamente convertirlo en una columna convencional.
de cualquier manera, siendo egoísta, yo lo hubiese preferido escribiendo algo en la sección cultural (prácticamente inexistente) que sin escribir nada. En fin, una pena...
Para Bonorum: así es compañero, se han cargado al atractivo principal. Lo que más me inquieta es saber si es una decisión que nace de la dirección de modo autónomo, de la propiedad o bien de algún personaje influyente. Pero imagino que eso no lo sabrá ni el propio Reig...
Un abrazo
Hoy, asi por resarcirme un poco y porque el Sr. Reig tiene familia que mantener, me he ido a buscar Visto para Sentencia a la Casa del Libro. Y no lo tenían...¿será esto una conspiracion?
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